Grupo de trabajo Time Loop Solution
Infección aguda
Hay muchas afirmaciones sobre Covid 19.
Según el Léxico:
Corona es el resfriado común. Algunos afirman que no hay virus, otros dicen que los coronavirus son exosomas, orgánulos celulares del propio cuerpo que desintoxican el organismo. Lo único cierto es que en Wuhan hubo una investigación de "ganancia de función" en la que se modificaron los "patógenos" del resfriado de los murciélagos para que pudieran transmitirse a los humanos, financiada por el virólogo jefe estadounidense Fauci.
A día de hoy, las tesis de que el ARN en cuestión contiene secuencias del sida y de la gripe española son controvertidas.
Polémica en sentido literal, con amenazas de muerte, censura y calumnias. Si nos fijamos en la primera oleada, se discute si las personas murieron por Covid, por el despliegue de las redes 5G o por las medidas médicas a las que se sometió a los enfermos.
Hoy en día se considera seguro que el Covid comienza primero como una infección del tracto respiratorio, desde allí infecta los bronquios y luego, a diferencia de todos los patógenos conocidos, hace un túnel a través de las paredes intestinales hasta la sangre, donde infecta la sangre y las paredes de los vasos internos. Esto conlleva un mayor riesgo de trombosis, deficiencia de oxígeno, los llamados pies covídicos y hemorragias bajo la piel.
La proteína de la espiga, que constituye la cubierta proteica de los patógenos y sirve de llave con la que éstos atacan a las células para replicarse, ha resultado ser extremadamente tóxica.
Si el sistema inmunitario se ve desbordado por la eliminación de estas cáscaras de proteínas, se produce una tormenta de citoquinas, una reacción exagerada y mortal de la defensa inmunitaria.
Además, esta proteína tiene una gran similitud con las proteínas del propio cuerpo en los órganos reproductores, lo que puede provocar una enfermedad autoinmune como consecuencia a largo plazo que dañe permanentemente el sistema reproductivo.